
Lo hermoso que es la vida
Lo poco que apreciamos su belleza
Lo mucho que lamentamos nuetras pasajeras penas
Lo mucho de lo que nos privamos
Duele mucho, estar ausente de nuestras propias vidas.
Deprimidos cronicamente, abrazados al silencio, llorando lagrimas en seco y tragandonos toda esa sal. Instalados en la sustancia misma de lo que esta configurada la muerte.